martes, 1 de abril de 2008

ANTES: TRIBUS URBANAS

LAS TRIBUS URBANAS


Dentro de la teoría del "Pesimismo cultural", se propone una nueva forma de sociedad basada en los llamados cánones del "multiculturalismo" (neomarxismo) en que se legitima de distintas formas aquellas subculturas y las llamadas minorías. La tribu urbana se concibe además, desde la categoría sociopolítica de lo "asistémico", es decir a partir de la horizontalidad social (rompe con todo lo jerárquico). Desde la ideología de la "deconstrucción" (Michel Foucault), la estructura social vigente comienza a promover por medio del acratismo, la autonomía y la autogestión, promoviendo la desaparición paulatina del concepto de Estado-Nación unitario. De esta manera desde la "microfisica del poder" se produce ese "empoderamieto" del poder para tomar el control de sí mismo, abolición de la familia tradicional y autoritaria, luego el barrio y más tarde la ciudad. Es la instauración de la fragmentación. Y es la transgresión cultural o mejor dicho la desacralización de "totems culturales"(Strauss) el medio de ir deconstruyendo el sistema vigente que es sinónimo de opresión y de represión que se expresan por medio de los rayados callejeros, con graffitis (Derrida sostiene que con el neolenguaje busca liberarse del concepto de "ser", donde solamente debe actuar el voluntarismo), Góticos, Punks, Neonazis incluso la delincuencia legitimada como expresión política.




El origen de las tribus urbanas

El origen de la tribu siempre está en el chico o chica de ciudad con necesidad de expresarse. De esa motivación surge el anhelo de unirse a otros, con gustos similares, y crear una red social dentro de su propio ámbito (ciudad, barrio, instituto), aparte del mundo adulto. Luego, buscarán un lugar en el que reunirse, cuyo centro puede ser la escalera del bloque, un parque o una cancha deportiva.


Esos espacios tienen tres funciones expresivas:
  • De pertenencia (a ese sitio, barrio o escuela).
  • De actuación (será donde se realicen las actividades lúdicas del grupo).
  • De representación (de sí mismo y del resto).
El joven urbano quiere salir de la masa uniforme de la urbe. Busca su identidad, con afán de resaltar, y busca el afecto de otros parecidos a él.

Las primeras tribus urbanas, tal y como las conocemos en la sociedad moderna, se dieron a conocer en el S. XX. Antes de los años 50, se pasaba de la infancia a la madurez con un chasquear de dedos. Pero fue a partir de los años 60 cuando se tuvo en cuenta la adolescencia.

El concepto tribu remite a la nostalgia de lo antiguo, a la vida tribal de los primeros hombres, como contrario a la civilización moderna. Los antiguos clanes estaban unidos por necesidades de parentesco, económicas y religiosas.

A lo que vivimos ahora, lo llaman neotribalismo: grupos multiculturales que participan y se identifican de igual a igual, sin jerarquías. Cada grupo tiene un estilo y unos rituales propios que los diferencian de todo lo ajeno. Unidos por los lazos de la amistad, sienten la tribu como un ser vivo.

La realidad de las tribus urbanas

De una forma u otra, todos formamos parte de una tribu. Todos nos englobamos en un determinado grupo social en el que hemos crecido: un barrio, una clase social, una familia, un equipo de fútbol...

Así han nacido todas las microculturas urbanas que pueblan el mundo occidental y así se suceden unas a otras.

Las innovaciones tecnológicas han beneficiado y enriquecido la relación entre apasionados por 'algo' desde una punta del planeta a la otra, así como la aparición de nuevas tribus. Heavys, neo-hippies, metaleros, otakus, frikis, góticos, raperos... La lista es larga y variopinta.

¿Cómo se identifican?


El lenguaje: "El argot de las tribus"

Un rasgo identificador tanto de los jóvenes (principales integrantes de tribus) como de las tribus urbanas es su jerga, a veces incomprensible para quienes los escuchan.
La lengua está viva y en constante desarrollo, y donde mejor puede verse es en las reuniones de adolescentes. Si le unimos los movimientos migratorios y la expansión de la cultura norteamericana a través de la televisión y del cine, la disparidad se multiplica.
Cada tribu tiene su propio argot, especialmente sobre aquello que los une y que comparten (un estilo de música o el gusto por rolear). Un léxico cargado de diversidad, en el que es normal escuchar extranjerismos, acrónimos o vulgarismos.
Por ejemplo, un amante de Tolkien no dice 'hola', sino 'aiya', ni se despide con un 'adiós', sino con 'namarïe'. En el lenguaje de un hacker informático, encontraremos multitud de bug, pass o exploit.


La música

Más de la mitad de las tribus conocidas tienen uno de sus rasgos más marcados, por no decir el propio origen, en un estilo de música: el rock de los mods, el reggae de los hippies, el techno de los maquineros o el punk de los punkies.
La música es una manera de percibir el mundo, de sentir las cosas. Y algo muy importante durante la adolescencia. Entramos en ella y parece que, por primera vez, descubrimos que existe la música, los artistas y los estilos.
El rocker, el grunge o el popero no es más que un fan de esa música, pero que ha decidido hacer de ella un estilo de vida.

La ropa

Otro rasgo que identifica al integrante de una tribu es la imagen. Cada tribu tiene una vestimenta y ciertos ornamentos propios y diferenciadores. No hay más que echar la vista atrás y recordar grupos juveniles de otras décadas: los pantalones de campana y el pelo afro de los 70 o los colores chillones de los 80.
Cada época tiene una forma de expresarme a través de la ropa. Si vemos a un chico de pantalones anchos y caídos, sudadera con capucha y zapatillas deportivas bien molonas, enseguida lo identificaremos como un rapero.


Por el contrario, si nos cruzamos con una chica que lleva vaqueros Levi's y una camiseta de Ruiz de la Prada, lo primero que nos vendrá a la cabeza es que se trata de una pija. Y así con todos: la ropa es el rasgo de identidad más inmediato.
Hoy en día vivimos una total libertad a la hora de elegir una indumentaria -al menos en el ámbito urbano. Ya no hay prendas exclusivas de un sexo u otro, ni colores ni complementos. Lo mismo puedes llevar unos pantalones desgastados, que un piercing en la lengua y una blusa transparente.
Tampoco hace falta ir contra el sistema para teñirse el pelo de azul. Es más, la moda pasa tan rápido que, en una misma vida, optamos por decenas de estilos distintos.

¿Son las tribus violentas?

Una subcultura la forman personas con gustos y comportamientos similares, diferentes a los de la mayoría de la sociedad a la que pertenecen. Esa distinción no los enfrenta, puesto que comparten las normas generales. Un ejemplo de subcultura son tribus como los siniestros o los heavys.
Sin embargo, una contracultura es un grupo de gente cuyos valores son opuestos a los de la mayoría de la sociedad en la que viven. Ejemplos de esto son los okupas o los skins, que sí presentan un comportamiento violento.

Las nuevas tribus

En los últimos años, con la revolución de las nuevas tecnologías e Internet, surgen tribus urbanas relacionadas con alguna de ellas. ¿Qué es un lamer, sino alguien que presume de conocimientos informáticos?
Otro ejemplo lo tenemos en los otakus, esos fanáticos de la cultura japonesa moderna, del anime o de sus pelis de terror.
Antes nos relacionábamos con amigos cercanos (vecinos de la misma calle, compañeros de clase...). Hoy, además de estos, entablamos relación con gentes de otras ciudades, países e, incluso, hacemos amigos con gente que habla una lengua distinta.

Tampoco podemos olvidar otra clase de tribus, que se relacionan por una pasión nacida de la cultura o el arte. Aquí encontramos a los recién nacidos frikis (como esos admiradores de El señor de los Anillos o de La guerra de las galaxias) o frikifans (apasionados por la trilogía Memorias de Idhún, de Laura Gallego), auténticas enciclopedias andantes de cualquiera de sus temas fetiche, ni a los nerds, chicos entregados a sus estudios, nacidos de la era universitaria.
Vivimos días cargados de multiculturalidad, en los que cada cual coge algo, de aquí o de allá, y lo convierte en propio. Ya no solo los rockeros visten de cuero negro (la generación Matrix también echa mano de él).


Las ciudades crecen; los chicos y chicas disfrutan de libertad y medios para inclinarse por una actividad u otra; la televisión e Internet nos muestran todo aquello que queramos saber de otras culturas o formas de vida. La globalización de la cultura nos enriquece en este aspecto.

Enlaces interesantes:

De las tribus urbanas a las culturas juveniles

Lista de tribus urbanas

La metáfora de las tribus urbanas y tribus urbanas como metáforas


Carmen Fernández Gavilán

3P2

1 comentario:

Anónimo dijo...

hola Carmen, acabo de leer tu articulo sobre tribus urbanas, pues estoy haciendo un investigacion de ellas. Entiendo que eres maestra de Pedagogia..., en fin solo queria pedir tu autoruzacion para citarte en mi investigacion.

Me puedes responder a raquel_chezra@hotmail.com

Raquel Carrera